Primer balanç del funcionament del Centre maternoinfantil de Muketuri

El mes de junio de 2012 acabará, como cada año, el curso escolar en el centro materno-infantil de Muketuri. El proyecto en el que AFNE está colaborando. Os hemos mantenido informados de las acciones y los progresos mensualmente, y ahora ha llegado el momento de hacer un primer balance.

Estamos satisfechos de poder decir que gracias a todos vosotros, durante este curso, se han podido hacer muchas mejoras.

El Centro San José está siendo un lugar de encuentro y de desarrollo para el pueblo de Muketuri. Además de las actividades de preescolar y de capacitación de mujeres, en el Centro se ofrece ayuda a enfermos, se imparten clases de inglés, se organiza un cine-fórum y varios talleres más.

El objetivo principal del proyecto es mejorar la nutrición de las familias, en especial de los niños y niñas, y esto se cumple alimentando a los menores que asisten al Centro ofreciéndoles una dieta variada y enseñando a sus madres a producir diversidad de alimentos. El cuidado del huerto, la construcción de pozos, la compra y alimentación de los animales, la mejora y mantenimiento de las instalaciones, han generado un notable cambio en el crecimiento, salud y aprendizaje de los niños y niñas que asisten al Centro.

También se está dando seguimiento a las personas que han realizado los cursos de agricultura y se ha comprobado que en su mayoría han continuado cultivando hortalizas y que los árboles que se les han repartido están a punto de dar fruto.

El balance es, claramente, muy positivo.

Muchísimas gracias por vuestras aportaciones. Continuaremos trabajando para hacer que los niños y niñas de Muketuri y sus familias tengan una vida mejor.

INFORME

Actividades escolares y resultados

El próximo mes de junio de 2012 acabará, como cada año, el curso escolar en el centro materno-infantil de Muketuri. En este último curso, la matrícula ha sido de 270 alumnos, de 4 a 6 años. Desde 2008, año en que se puso en marcha el Centro San José, se han beneficiado directamente 670 niños y niñas que han recibido formación preescolar. En este tiempo, 350 niños y niñas han pasado a primaria con un muy buen nivel académico, notablemente superior al resto de alumnos de primaria que no han cursado preescolar.


Durante el mes de julio se imparten cursos de verano y se mantiene abierto el comedor para los alumnos que asisten a estos cursos. En agosto, durante la época de lluvias intensas, el Centro permanece cerrado hasta el inicio del nuevo curso escolar que tiene lugar pocos días después del inicio del año nuevo etíope (11 de septiembre).
Desde ese día hasta que se celebra la fiesta de final de curso, en la que los alumnos de cada aula cantan canciones en inglés, interpretan obras de teatro, leen poesías o realizan bailes para que los padres puedan ver lo que sus hijos han aprendido, la actividad se sucede según la pauta siguiente:

Los niños llegan a las 8:30 h de la mañana y se quedan hasta las 15:00 h.
Al llegar, se les da desayuno y a las 13:00 h reciben una comida preparada por las dos cocineras que trabajan en el Centro. Para desayunar toman leche con soja, con avena o con pan y para almorzar, legumbres (lentejas, habas, guisantes o garbanzos), pasta o huevo con verduras (acelgas, espinacas, calabacín, patatas, zanahoria, cebollas, tomate, remolacha) de las que se producen en el huerto del Centro.


En el proyecto de Muketuri se presta mucha atención a los aspectos nutricionales ya que son esenciales para garantizar la salud y el rendimiento escolar.

Los alumnos están repartidos en cinco aulas y al frente de cada una hay una maestra. Las maestras son mujeres del pueblo de Muketuri, a las que se subvencionó un curso de maestra de preescolar en Addis Abeba el año 2008. Además, trabajan en el Centro dos ayudantes que asisten a las maestras y ayudan a servir la comida, cuidar de algún niño enfermo, llevarlos al baño, etc.

Trimestralmente, los menores pasan una revisión médica, en el que se controla el crecimiento en talla y peso, se tratan hongos en la piel, infecciones en ojos y oídos, y se revisa la higiene. Si se detecta alguna enfermedad que no se pueda tratar en el Centro se informa a los padres para que lleven al niño al centro de salud del pueblo.
El 86% de los niños y niñas han ganado peso y talla, y como resultado de la mejora en la alimentación se han prevenido enfermedades.

Mensualmente se celebra una reunión con el Comité de Padres, que está formado por cuatro hombres y cinco mujeres. En estas reuniones se habla de todo lo que tiene que ver con la educación de sus hijos, se verifica que el Centro funcione correctamente, que la comida sea el adecuado, etc.

Las familias de los niños deben hacer una contribución simbólica en el Centro que consiste en 20 birr, equivalente a 0,83 € mensuales. Aunque la cifra es muy modesta, hay 42 familias que no pueden pagar en dinero. A estas se les pide que vayan al Centro una vez al mes para trabajar en tareas como la limpieza de grano o lavar los platos de los niños. Esta aportación de todas las familias sirve para que los padres den valor a los beneficios que reciben en el Centro.

La huerta y los animales

Hay tres personas contratadas dedicadas a la agricultura. El Centro cuenta con un huerto que produce todas las verduras que se consumen diariamente para los niños.
En el terreno del Centro se han plantado un total de 800 árboles frutales. La mayoría son manzanos, pero también hay perales, ciruelos, melocotoneros y almendros comprados a un vivero español.

El Centro cuenta con 100 gallinas que se adquirieron en 2010 para poder incluir huevos en la dieta de los niños por la importancia de las proteínas en el desarrollo infantil. Con el mismo objetivo, en el mes de mayo de 2012 se adquirieron cuatro vacas, una de ellas embarazada y que dio a luz un ternero en el mes de septiembre. Estas vacas producen una media de 25 litros de leche cada día, cantidad suficiente para el consumo diario de los alumnos que asisten al Centro. Actualmente hay otra vaca que está a punto de dar a luz otro novillo y una más que lo hará dentro de dos meses.

Capacitación de las madres

Cada año se organizan dos cursos de capacitación de mujeres entre las madres de los niños y las niñas del centro de Muketuri.

En 2011, un total de 180 mujeres asistieron a los cursos en tres poblados de la zona: Muketuri, Mechelen Andode y Gimbichu. El curso cuenta con una parte teórica y una parte práctica. En la primera se les enseña la importancia de la alimentación en la salud, así como hábitos de higiene. En las sesiones prácticas las mujeres aprenden a establecer y cuidar un huerto, producir compost como fertilizante biológico, a cocinar las hortalizas ya preparar conservas.

Al final del curso las mujeres reciben un diploma, herramientas, regaderas, árboles frutales y semillas para hacer un huerto en casa. El curso tiene muy buena acogida entre las participantes ya que tienen la oportunidad de producir verduras en casa para consumo personal y para la venta.
Los cursos de agricultura han formado parte del programa en Muketuri desde el principio ya que se pretende mejorar el estado nutricional de la población infantil y para ello, cuando los niños dejan de asistir al Centro porque ya les toca ir a la escuela primaria, la idea es que en casa puedan producir verduras.

Pozos

Desde hace dos años este programa ha empezado a complementar con el de excavación de pozos, ya que la mayoría de las familias tienen difícil acceso al agua. Muchas mujeres obtienen agua de algún manantial en 7 u 8 km (el agua que llevan cargando será para beber, no para regar) o bien, cogen agua de las cuatro fuentes públicas que hay en Muketuri, donde pagan 50 céntimos el bidón de 20 litros, y por tanto, tampoco la pueden utilizar para regar, sólo para beber.

Se ha iniciado, además, un programa de excavación de pozos superficiales en los poblados de Mechelen Andode y Gimbichu, que son poblados sin acceso al agua y que sólo contaban con el agua de las lluvias. Cada pozo se hace para que cinco familias lo puedan compartir. Por eso las cinco familias firman un acuerdo conforme compartirán el agua. Son pozos de 5 a 15 metros de profundidad y funcionan con una bomba manual. En la actualidad ya se han excavado un total de 36 pozos.

Cuidado de niños con problemas especiales y niños desnutridos

En 2010, miembros de la comunidad misionera de Muketuri descubrieron el caso de una familia con hijos discapacitados y se decidió a ayudarles. Todos los días de la semana asisten al Centro tres hermanos: dos niños con espasticidad y un tercero con sordera. Estos niños reciben alimentación, se les baña, les da masaje y se les estimula. A las 15:00 h se les lleva a su casa.

También una vez al mes se atienden niños y mujeres con problemas de desnutrición, se les reparte alimento especial, grandes y verduras. La mayoría de estos niños son gemelos o huérfanos de madre, o bien de mujeres embarazadas mal alimentadas. En la actualidad, se está atendiendo a seis parejas de gemelos que no habrían podido sobrevivir con la leche de su madre.

Con esta finalidad se está construyendo un aula con baño que está casi terminada, sólo le faltan los acabados y el equipamiento para ponerla en marcha.

Valoración general del proyecto

El Centro está siendo un lugar de encuentro y de desarrollo para el pueblo de Muketuri. Además de las actividades de preescolar y de capacitación de mujeres, el Centro ayuda enfermos, se imparten clases de inglés, se organiza un cine-fórum y varios talleres.
El objetivo principal del proyecto es mejorar la nutrición de las familias, en especial de los niños y las niñas, y esto se cumple alimentando los menores que asisten al Centro, acostumbrando a comer una dieta variada y enseñando a sus madres a producir diversidad de alimentos. Los huertos permiten producir durante todo el año. El cambio en crecimiento, salud y aprendizaje en los niños que asisten al Centro es notable y reconocible.

En el año 2011, una voluntaria chilena hizo un estudio (como trabajo de fin de carrera) para comparar el desarrollo psicomotor de niños de primero de primaria que habían asistido al Centro con niños que no habían asistido. Los resultados fueron muy positivos, ya que tanto en el desarrollo psicomotor como en su crecimiento se ve una gran diferencia entre ambos grupos. Los alumnos del Centro están dentro de los estándares internacionales mientras que los niños que no asistieron se encuentran por debajo de lo normal.

Los cursos de agricultura se iniciaron en el año 2009 y hasta hoy se ha capacitado 370 mujeres de los tres poblados mencionados antes y 50 hombres, agricultores del poblado de Gimbichu, que al ver los beneficios que podían obtener pidieron que se les permitiera registrarse para aprender también ellos a cultivar hortalizas. Se está haciendo un seguimiento de las personas que han realizado los cursos y se ha comprobado que mayoritariamente han continuado cultivando hortalizas y que los árboles que se les han repartido están a punto de dar fruto. En este seguimiento se les ayuda a podar los árboles para obtener mejores resultados.

Son varios los poblados que nos han pedido atención, ya que el problema de la desnutrición infantil está muy extendido. Tal ha sido el caso de Mechelen Andode, a 5 km de Muketuri, que desde 2009 funciona como centro de nutrición para 100 niños, tomando como modelo el centro de Muketuri.

 

Lourdes Larruy Carre.

Directora Centro Muketuri